La demanda de alimentos aumentará debido al crecimiento de la población mundial. A ello se suman los cambios en los patrones de consumo, los cuales van a reconfigurar los mercados de alimentos en el marco de la denominada “nueva normalidad” postpandemia. Frente a este contexto tan cambiante se presenta el desafío de cómo incorporar un enfoque de sostenibilidad a las respuestas de los principales actores y stakeholders del sector alimentario.
Asimismo, la cooperación entre estos actores será crucial para generar entornos que fomenten la innovación con una mirada puesta en el futuro. Para ello es necesario que se apliquen instrumentos tales como el estudio de futuros, los cuales contribuyen al desarrollo de ecosistemas de innovación por medio de procesos y métodos de prospectiva aplicados.
